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SOCIEDAD
01.03.2018
La reina mendocina de la Vendimia de la Diversidad tomó la decisión de renunciar a su título después de que la obligaran a depilarse las axilas.
La Vendimia de la Diversidad tuvo un escándalo provincial cuando su reina electa renunció al título por no querer depilarse las axilas. Malen Puga rechazó la imposición del organizador y se alejó del comité de la fiesta por motivos políticos. “Llevo las axilas con pelos porque se me da la gana y no quiero que se me juzgue por eso. Es una imposición cultural”, dijo la ex reina a Diario UNO.
Según el portal, la joven mendocina contó que desde el inicio de su mandato en 2017 se sintió discriminada y maltratada con “reiteradas agresiones simbólicas”. Pero el productor Gabriel Canci dijo que fue muy difícil trabajar con ella porque tenía comportamientos “bipolares” y un “doble discurso”. “Fue la peor reina de la Vendimia de la Diversidad que tuvimos”, disparó.
Lo que es cierto es que la estudiante de Comunicación Social renunció durante la prueba de vestuario de esta semana. “No quería tolerar más atropellos a mi persona. Para mí es necesario desnaturalizar las ideas que nos imponen desde chiquitos”, dijo. Puga dio a conocer públicamente su decisión con un video que se viralizó en las redes sociales.
“Estoy acá para romper con los moldes. Tenía la esperanza de mostrar en Vendimia un nuevo modelo de mujer, una que no les hace caso a los prejuicios y estereotipos ajenos, una mujer que se enfoca en otras cosas y hace caso omiso a los cánones de belleza establecidos que poco me agradan”, dijo en el video.
Desde el comité organizador hablaron sobre el escándalo y dieron su versión de los hechos. “Somos inclusivos, pero también somos estéticos y pulcros y considero que no es agradable que la reina se muestre con pelos de diez centímetros de largo en las axilas. No es la imagen que nos ofreció a nosotros ni al público que la votó y eligió. Ella se había mostrado fina, dulce y delicada y tiene un contrato firmado”, dijo Canci.
El lugar de Puga va a ser ocupado por María Pía Martignoni, una activista trans defensora de los derechos humanos.
FUENTE: LA NACIÓN
