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“No hemos sido eficaces para resolver este problema de la manera más razonable. Impedir la protesta social es una materia absolutamente imposible”, admitió el gobernador Jorge Capitanich al referirse a la persistencia de los piquetes en toda la provincia, principalmente en Resistencia, en el entorno de la Casa de Gobierno.
Ya en las primeras horas después de las primarias del 12 de septiembre, identificó las protestas sociales como una de las razones de la derrota electoral: “Mucha gente que coincide con nosotros vota en contra precisamente por ese conflicto”, dijo en una entrevista con Diario Chaco.
“La gente cree que nosotros podemos resolver un conflicto que es un tema que nos excede, porque no se trata solamente de medidas de carácter represivo, necesita de una construcción de una cultura que implique el respeto irrestricto a la democracia pluralista y a la libre manifestación de las ideas”, dijo para diluir responsabilidades.
Para él, la cuestión está ligada a la idiosincrasia de los chaqueños: “Chaco es una provincia que tiene sus propios clivajes en tema de protesta. Todos los gobiernos han tenido protesta social, todos. El chaqueño se expresa y se expresa de una manera muchas veces dura con quienes gobiernan y eso forma parte de una democracia pluralista”, analizó.
Pero, además, considera que este tipo de protestas son naturales de la democracia: “Hay muchos que creen que en una democracia nadie debe protestar. Creo que no es compatible con una sociedad democrática la inexistencia de la protesta”.
En este marco, agregó que muchas de las organizaciones y movimientos sociales y políticos que insisten en los cortes de calle son sectores “opositores”, lo que, según su visión, explica una posición irreductible. Sin embargo, muchos de los movimientos piqueteros son sus aliados en el Frente de Todos Chaco e incluso han organizado actos en los que él se presentó como principal orador.
FUENTE: HDP NOTICIAS
